Lo especial de este relato es que la verdadera trama no está en la historia en sí, sino en los pequeños detalles que hay escondidos a lo largo de esta aparente vida perfecta. Lo escribí así porque a veces descubrir qué fue lo que ocurrió es más divertido que simplemente leer lo que simplemente ocurrió. Lo escribí así para que se pueda pensar en lo que sucedió y tratar de buscar más detalles que confirmen la teoría. Por eso creo que sería un poco estúpido poner una explicación de este relato, por lo menos así de primeras. Lo ideal sería que la gente me dijese a mí de que creen que va el relato. Quién sabe... quizás hay más historias de las que yo mismo puedo ver. Agradable luz sobre mi rostro, acariciando cada centímetro de mi piel, mientras una reconfortante calidez en mi espalda hace que me estremezca. El pecho de la persona que está a mi lado sube y baja con parsimonia, estoy segura de que está soñando cosas bonitas, y sus brazos me rodean de una forma tan cariñosa que solo
Escribo relatos. Y eso.